viernes, 12 de octubre de 2012

12 Octubre nada que festejar.



     Desde niño me dijeron que el 12 de octubre se celebra el día del descubrimiento de América, el día en el que un valiente navegante, descubrió un continente. Que en sus 3 barcas trajo consigo el avance de las civilizaciones y que gracias a él debemos nuestra historia, nuestra cultura, nuestras patrias etc.

     Lo que nunca me dijeron fue que con él también vinieron enfermedades, asesinos, una religión que nos ha hundido en la miseria, y en nombre de un dios (su dios) execraron todo el legado cultural que poseíamos, obligaron a los verdaderos dueños de estas tierras a ceder sus territorios y a regalarles el oro y demás piedras preciosas, con las cuales edificaron sus palacios los reyes, nunca me contaron que no fue un regalo y no fue que nuestros aborígenes cobardemente se rindieron a pies del invasor; nunca me dijeron las sangrientas batallas que en estas tierras se desataron y los grandes héroes autóctonos que lucharon hasta morir por lo que les pertenecía, la lista es numerosa pero entre los más destacados guerreros que la historia opaco Los Caciques Guaicaipuro, Terepaima, Tiuna, Yare, Maiquetía, Mara, Cayaurima, Naiguatá, Chacao, Guaicamacuto, Baruta,  por mencionar algunos, y sus historias son bastante dolorosas y a la vez reconfortantes, por que demostraron gallardía y coraje al defender sus tierras y su dignidad a no ser pisoteados y preferir morir combatiendo a pesar de la diferencia tecnológica, muy distinta a la historia de un colon con sus curitas que en señal de la cruz llegaron a nuestras costas y fueron recibidos con presentes a cambio de vidrio. 

     Y esto apenas fue el comienzo de la masacre, puesto que luego de las guerras y de dominar por la fuerza provinieron las conquistas culturales y raciales, porque no fue que nuestras indias se enamoraron, sino fueron víctimas de violaciones por parte de estos desadaptados sociales que embarcaron en Europa, en la medicina nos robaron recetas naturales que luego fueron patentadas, y una de las bases fundamentales de nuestros aborígenes que es los rituales mágicos propios de los chamanes, paleros, brujos etc., fueron satanizados por parte de la iglesia católica para así hacerse con esas técnicas y muchas otras erradicarlas a su conveniencia, ya lo dije en un artículo titulado “demonios con sotana parte I y II” publicadas en ediciones anteriores, sus santos o adoraciones fueron sustituidos por los santos europeos los que hoy conocemos como san tal cosa, casualmente todos corresponden a una divinidad aborigen, también se nos fue arrebatado nuestra cocina y nuestros inventos originarios, contrariando así el supuesto significado del indio bruto que según eran, pero vaya que aportes han dado al antiguo y avanzado continente y aun hoy con toda nuestra tecnología siguen ellos muy avanzados en algunos aspectos. América tanto como África fuimos víctimas de una abominable masacre y no alcanzarían las páginas para contar los muertos conocidos y registrados imagínense los que nunca se anotaron en las bitácoras españolas, se estima que ni la segunda guerra mundial, las cruzadas y las campañas de gengiskahn juntas se masacraron tanta gente como las conquistas a estos continentes, desde la punta del norte en Alaska, hasta la punta de plata en Argentina fueron abolidas civilizaciones por completo, las más destacadas los Mayas y los Incas que demostraron tener un avance bastante importante en muchas áreas sobre todo la astronomía, y hoy en día se habla de sus profecías que según en estos años se cumplen algunas y muchas otras ya fueron vividas, lo trascendental es como nos hemos atrasado, así que antes de pensar y ver la magnífica Europa que hoy se yergue sobre bases solidas de siglos de avances, veamos la realidad de cada monumento y del origen de sus materiales y quizás tengan mucho de nosotros. No bastara regresar las riquezas materiales, lo más importante se ha perdido, muy similar a lo que hace pocos años ocurrió en Iraq donde muchos registros históricos se esfumaron y así con ellos la historia, pero el mundo seguirá girando y no pretendemos que restauren por que es imposible, pero si exigimos respeto y dignidad para nuestros pueblos. 



     No tenemos nada que celebrar el 12 octubre, debemos más bien conmemorar y sentirnos orgullosos de la batalla dada por nuestras tribus, y seguir el ejemplo de lucha por la dignidad que no se compra con dinero ni se persuade con armas, hoy más que nunca debemos pararnos firmes ante los imperios asesinos que tienen sus manos bañadas en sangre, que aunque sus ciudades hoy resplandecen en la gloria de nada vale por que sus historia son vacías y carentes de sustento, he ahí una potencia proveniente de una masacre a un pueblo desarmado, una usurpación y explotación desmedida de sus tierras que ya no dan más vida, eso es lo que son hoy los EEUU. 


Debemos reflexionar sobre las grandes deficiencias que tenemos, de una forma estos ancestros habían logrado el equilibrio perfecto entre la tecnología y la madre tierra, entre la religión y la ciencia, aprendamos de nuestros aborígenes que la naturaleza no es para vivir de ella sino para vivir con ella, que si abusamos de sus bondades mañana nos pasaran factura, y vaya que esa deuda si será impagable y no habrá poder alguno que podamos dominar que nos salve del hades de la destrucción, el hombre se ha convertido en un arma de destrucción masiva y si no nos detenemos perderemos nuestro paraíso, América y África aun son recintos vírgenes que debemos preservar, no se trata de permanecer en el oscurantismo tecnológico y vivir aislados de los avances pero si rescatar esas enseñanzas ancestrales de nuestros orígenes y aprender de una buena vez que la vida es verde y no gris, que dependemos de la naturaleza y no de una selva de cemento, el 12 de octubre de 1492, ese lazo de equilibrio se rompió, por la infame injerencia del invasor, hoy a 517 años es nuestra responsabilidad histórica y para con la humanidad rescatar ese punto de fusión entre el hombre y el mundo, la madre tierra llora de dolor y clama por nuestra atención, y si no actuamos a tiempo que será de nuestras futuras generaciones. Vivan los pueblos aborígenes y mis respetos a su conocimiento, hoy más que nunca su tecnología ancestral se hace vigente y necesaria, exigimos al vaticano libere los documentos robados a nuestros templos que ahí se haya información vital y de ella dependerá la vida en el futuro, empieza la nueva era y con ella llegan los cambios que en estos años estamos viendo, América le toca el cetro del poder y eso potencia alguna lo evitara, próxima potencia se destara y como dijo el Che “Y su marcha, de gigantes, ya no se detendrá hasta conquistar la verdadera independencia, por la que ya han muerto más de una vez inútilmente”, no caigamos en la codicia de las potencias y cometamos el mismo error, la clave está en la fusión de lo tecnológico con lo verde y lo místico de nuestros antecesores.